Foro 14

La E.E.M.Nº14 participa del foro TEMA: IDENTIDAD

El pasado indígena, pesa como una carga oscura y no totalmente integrada. Hoy se los reconoce, pero la marginación no cesa a pesar de los intentos por detenerla. El conocimiento y la difusión de nuestras culturas originarias pueden no sólo contribuir a luchar contra el prejuicio y la discriminación, sino también ayudar en la preservación y reconstrucción de la identidad cultural de los pueblos originarios como habitantes reales de nuestro territorio.
“Lo que no se conoce no se ama, lo que no se ama no se protege, y lo que no se protege no se rescata”
Por lo general, antes de la conquista de América, el conquistador hacía suya la cultura del conquistado, al mismo tiempo que enriquecía la de éste. Todo lo contrario ocurrió en América, el conquistador y el conquistado se presentan como oposiciones cerradas, imposibles de sintetizar. El conquistador no quiere ser asimilado, pero tampoco asimilar. Busca imponerse manteniendo su propia identidad, no quiere ser identificado con los hombres y pueblos que ha sometido. Los conquistadores ibéricos trataron de imponer su cultura y de extirpar la aborigen, ya que era vista como "demoníaca". En la actualidad, los aborígenes luchan por rescatar su identidad y darse a conocer al mundo. Para esto, forman organizaciones políticas que se autodenominan indias o indígenas, o bien adoptan el nombre del grupo étnico al que representan. Los símbolos, emblemas, alegorías, signos gráficos, musicales o de cualquier otro tipo, que fueran creados o usados ancestralmente por los Pueblos, son muestra de su identidad. Los restos arqueológicos: humanos, documentales, arquitectónicos y artísticos. A través de esta investigación se tratará por medio de la hipótesis, de demostrar cómo con la invasión del continente, por parte del conquistador europeo, el aborigen se transformó en indio, y hoy es él mismo quien creará al nuevo indígena americano. La importancia de este problema reside en la comprensión de las luchas que llevan a cabo los movimientos indígenas para lograr mantener su cultura y costumbres sin que el sistema imperialista disfrazado de globalización se lo impida. Para esto, recurren a los valores y virtudes de las antiguas grandes civilizaciones, de las cuales descienden y son legítimos herederos de su legado cultural. Al llegar el invasor europeo a un continente casi virgen y tomar contacto con los aborígenes que lo habitaban, se inició el proceso de estructuración del indio, primero como ser infrahumano, casi animal, como inferior después (dogma que persiste en la actualidad en la cultura occidental, no así entre los pueblos indígenas). Ese mismo etnocentrismo llevó al conquistador a negar y esconder el desarrollo, los pensamientos y virtudes de los pueblos y civilizaciones americanas. En la creación del indio influyó en gran medida la matanza, la esclavitud, la infamia en la que el aborigen vivió en los primeros siglos de la conquista, sumado al colonialismo, al hambre y a la miseria que se sumó después, justificada por la hipocresía y el exacerbado etnocentrismo del capitalismo occidental. Pero es en la actualidad, cuando el antiguo indio subordinado está de pie luchando por su dignidad, elevando la figura de sus ancestros, para reconstruir en forma continua su propia vida, luchando por demostrar que no son "una raza débil que va extinguiéndose", sino que sigue existiendo orgullosa y soberbia. Hace quinientos años el europeo crea, dialécticamente, al indio. Hoy es el indio el que se crea a sí mismo. Para preservar y revalorizar su identidad averiguamos que se crearon instituciones en dónde se enseñan las lenguas Quechua, el Mapuche, el guaraní aunque no son las únicas, no sólo se quedan en actividades áulicas sino que se promueven actividades realzando las fiestas que los caracterizaron: cómo el día de la Pacha Mama, la fiesta del sol, se lleva una semana del Aborigen en dónde vienen líderes de las comunidades para testimoniar sus experiencias o problemáticas y las exponen.De ésta manera se pretende mantener viva la identidad y tradiciones de los pueblos originarios y trasmitirlas a todos nosotros y justamente está en nosotros preservarla y mantenerla viva.

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